Los Hongos de la marihuana: Prácticamente todas las personas que cultivan y han cultivado cannabis alguna vez han tenido que lidiar con la desafortunada presencia de hongos. Las consecuencias de tener estos organismos en tu cultivo pueden ser realmente desastrosas y si no se toman medidas a tiempo, corremos el riesgo de perder todo aquello por lo que hemos trabajado tanto.
En este artículo explicaremos qué son los hongos y haremos una pequeña introducción a los más comunes que pueden afectar a nuestro cultivo, cómo combatirlos y prevenir su aparición.
¿Qué son los hongos?
Los Hongos son organismos eucariotas muy primitivos que pertenecen al reino de los Fungi, se reproducen a través de esporas y suelen aparecer en lugares cálidos, oscuros y húmedos.
Las esporas de los hongos están en el ambiente hasta que encuentran las condiciones idóneas para crecer y desarrollarse. El problema está en que las condiciones de desarrollo de los hongos son muy similares a las de las plantas, oscuridad, calidez y humedad, así que no es de extrañar que en los cultivos proliferen este tipo de seres vivos.
Hay algunos hongos capaces de reproducirse muy rápidamente, en tan sólo unos días podemos tener todo el cultivo infectado, es por ello que es fundamental tomar una serie de medidas preventivas para evitar su aparición. Si la prevención no funcionase y los hongos atacaran nuestro cultivo, la detección precoz y la rápida actuación para eliminarlos, son esenciales para evitar males mayores y poder salvar nuestra cosecha.
Medidas de prevención.
Limpieza:
La limpieza es fundamental a la hora de llevara a cabo un cultivo. Un lugar limpio y desinfectado no sólo ayudará a evitar la presencia de hongos, si no de otras plagas dañinas que afectan a nuestras plantas de cannabis como la araña roja o la mosca blanca.
Antes de proceder a realizar un cultivo de interior es importante que el espacio dedicado a este fin sea adecuadamente desinfectado con lejía, además de utilizar utensilios limpios y mantener una higiene constante del lugar durante todo el proceso, eliminando las hojas muertas y los restos que hayan podido quedar. Una vez finalizado el cultivo, deberemos limpiar y desinfectar de nuevo el espacio para que quede libre de cualquier organismo.
Asimismo, es importante no utilizar agua de lluvia directamente ya que ésta podría contener restos que infectases nuestras plantas.
Control del clima.
Otro de los factores esenciales a tener en cuenta en la prevención de hongos es el clima. Evitar las condiciones propicias para impedir su aparición pasa por tener una buena ventilación en nuestro espacio de cultivo y controlar la humedad.
La habitación donde se cultive debe de estar permanentemente ventilada, impidiendo así que quede aire estancado durante tiempo y renovándolo constantemente.
También deberemos controlar la humedad que no debe ser superior al 50%, especialmente en la fase de floración. Para ello, podemos utilizar deshumidificadores que absorban la humedad del ambiente evitando que ésta se dispare.
Es evidente que estos parámetros son mucho más sencillos de controlar en los cultivos de interior. En exterior, es más complicado controlar ciertos factores como la humedad o la circulación del aire, pero podemos mantener una higiene adecuada dentro de nuestras posibilidades y, según en las regiones en las que vivamos, deberemos evitar sembrar variedades demasiado tardías que puedan verse afectadas por las lluvias de otoño.
También podemos utilizar fungicidas que ayuden en la prevención de los hongos como el Própolix, elaborado a base de propóleo, una sustancia natural empleada por las abejas que actúa como antiséptico, fungicida y antiviral.
Si las medidas de prevención no han funcionado y nuestro cultivo se ha visto afectado por cualquier hongo, a continuación os dejamos un listado con los más comunes que pueden atacar nuestras plantas, cómo detectarlos y tratarlos.
BOTRYTIS.
La botrytis o moho gris es un hongo patógeno especialmente común en los cultivos de interior y en los de exterior que se cosechan en épocas lluviosas.
Afecta principalmente a los cogollos en la fase de floración debido a humedades altas y falta de ventilación.
Podemos detectar fácilmente la botrytis ya que los cogollos y otras partes de la planta como los tallos y hojas se vuelven de color gris o marrón. Los cogollos están secos y se descomponen cuando los tocas.
Este hongo produce la necrosis de las partes a las cuales afecta y se reproduce extremadamente rápido.
Es muy común y muy dañino ya que si no se controla a tiempo, destruye totalmente la planta y nuestra cosecha.
Este hongo puede afectar a los cogollos durante la fase de secado y curado, por lo que es muy importante controlar el aire durante esta etapa también.
Tratamiento y soluciones:
El mejor tratamiento para la Botrytis es la prevención, ya que afecta normalmente a las plantas en estado de floración y no se puede utilizar ningún producto químico.
Es fundamental extremar las medidas de prevención y estar especialmente atentos cuando se cultiven variedades índicas que tienen cogollos más densos y compactos.
Una buena ventilación, un espacio limpio y desinfectado y una humedad por debajo del 50% son clave para impedir la aparición de este hongo.
Cuando detectemos Botrytis en nuestras plantas debemos cortar la parte afectada y eliminarla. Estas partes dañadas no podemos utilizarlas bajo ningún concepto, ni siquiera para realizar extracciones ya que la Botrytis es muy perjudicial para nuestra salud.
Como preventivo podemos utilizar fungicidas como el propóleo y en el caso de que no podamos controlar la infección y las plantas no están todavía listas para cortar, podemos utilizar acelerantes del ciclo que nos permitan cosechar antes como el Ripen.
OÍDIO.
El hongo oídio es también uno de los hongos más comunes que podemos encontrarnos en el cultivo de cannabis. Es bastante fácil de detectar ya que en un primer momento, se manifiesta en forma de polvo blanco, generalmente en el limbo de la hoja, que progresivamente se va extendiendo hasta llegar al tallo y a las flores. Cuando el oídio está más extendido causa amarilleamiento en las hojas y defoliación.
Es un hongo al que le gusta la humedad y la temperatura alta, se deposita en las hojas y con sus hifas absorbe los nutrientes de la planta.
No es un hongo especialmente dañino pero es muy común y si no se controla a tiempo y llega a alcanzar los cogollos, estos deberán desecharse ya que, al igual que los cogollos infectados de Botrytis, no pueden ser consumidos de ninguna forma por ser perjudiciales para nuestra salud.
Tratamiento y soluciones:
Lo mejor que podemos hacer con el oídio es evitar su aparición intentando no tener las condiciones propicias para su aparición (humedad relativa y temperaturas altas, así como cambios bruscos de temperatura).
Sin embargo, si no hemos podido impedir que aflore, podemos eliminar las partes infectadas, teniendo mucho cuidado de no esparcir más las esporas que se encuentran en las hojas.
También podemos utilizar fungicidas como el propóleo y la cola de caballo o utilizar azufre.
Si estos métodos no funcionan, deberemos utilizar fungicidas químicos para eliminar esta molestia presencia de nuestros cultivos.
En el caso de que estuviésemos en fase de floración avanzada y no pudiésemos utilizar productos químicos, deberemos intentar controlar el hongo y cosechar lo más pronto posible antes de que se extienda e inutilice los cogollos.
MILDIU.
El mildiu es un hongo bastante agresivo que prolifera en los lugares con temperaturas por debajo de los 26ºC y una humedad superior al 50%. Puede afectar a las plantas tanto en fase de crecimiento como de floración, aunque siente predilección por las hojas jóvenes.
El mildiu se manifiesta en forma de manchas amarillentas y pálidas en las hojas y, no siempre, podemos observar un polvo blanco parecido al del oídio en el envés de las hojas. Cuando la enfermedad está más avanzada provoca que la defoliación de las hojas y posteriormente la muerte.
Se propaga muy rápidamente siendo capaz de acabar con cultivos enteros en cuestión de días, y se desarrolla principalmente a partir de los restos de materia vegetal de los cultivos.
Tratamiento y soluciones:
El mejor método para tratar el mildiu, como en todos los hongos y plagas, es evitar su aparición. Es un hongo muy agresivo, en el que, una vez hayamos detectado su presencia por los síntomas anteriormente descritos, significa que la planta ya esta afectada de forma sistémica.
Es fundamental la limpieza del espacio de cultivo y la eliminación de los restos vegetales que fomentan su aparición.
Si nuestras plantas han sido atacadas por este hongo deberemos eliminar las hojas que estén más infectadas, separar las plantas y ventilar la habitación para que circule el aire y no esté viciado.
Debemos evitar las condiciones ambientales que fomentan el desarrollo del mildiu: temperatura por debajo de los 26ºC, humedad y oscuridad.
También deberemos utilizar productos para eliminar el hongo, para el tratamiento del mildiu existen fungicidas por contacto y sistémicos que deberán aplicarse entre las 24-72h desde la infección.
También podemos utilizar azufre para tratar el mildiu pero siempre con una temperatura inferior a 32ºC y una humedad superior al 50% para evitar daños en el follaje.
Existen alternativas como el caldo bordelés que se ha utilizado tradicionalmente para el tratamiento de este hongo.
TIZNE O NEGRILLA.
El tizne o negrilla es un hongo que aparece a partir de una sustancia pegajosa que excretan algunos insectos como el pulgón o la mosca blanca. Esta sustancia parecida a la melaza es la que provoca la aparición de este hongo.
El tizne puede detectarse a simple vista ya que las hojas quedan cubiertas de manchas negras. El ataque de este moho provoca que la planta tenga problemas para realizar la fotosíntesis, con los problema de desarrollo que ello conlleva: ralentización del crecimiento, pérdida de vigor y disminución de la cosecha.
Tratamiento y soluciones:
El mejor tratamiento para eliminar este hongo es erradicar la plaga causante de su aparición. Una vez hayamos erradicado los insectos que excretan la melaza, el moho morirá y evitaremos su propagación.
Deberemos lavar con jabón los restos de melaza y de hongo, no recuperaremos lo afectado pero detendremos su propagación.
FUSARIUM.
El fusarium es un hongo con un gran potencial destructor. Es más común en los cultivos de interior y en invernaderos donde la temperatura es más elevada.
Este hongo suele transmitirse a la planta a través del agua, del sustrato, de utensilios o esquejes infectados.
Este hongo afecta al xilema de la planta, un tejido vegetal que se encarga del transporte de los fluidos, bloqueando el flujo de nutrientes y afectando gravemente a la planta.
Comienza con el amarilleamiento de las hojas de la parte inferior de la planta, posteriormente ocasiona clorosis nerval de las hojas, necrosis y defoliación, por último, la planta se marchita. Puede que este hongo sólo afecte a la planta de manera parcial, dependiendo por dónde se haya introducido. Es un proceso muy rápido que acaba con la vida de las plantas de forma fulminante.
Podremos detectar al hongo fusarium observando el interior de los tallos que se habrá vuelto de color marrón rojizo.
Tratamiento y soluciones:
Una vez nuestra planta se ha infectado con el hongo fusarium ya no hay tratamiento posible. Lo único que podemos hacer es tratar de evitar la aparición manteniendo siempre la máxima higiene.
Utilizar siempre instrumentos esterilizados, mantener la higiene en la ropa y las manos, controlar el agua de riego y el sustrato y evitar utilizar esquejes que puedan estar infectados de hongos. La higiene en el cuarto de cultivo es fundamental para evitar la proliferación del hongo fusarium y de las demás plagas y enfermedades.
PODREDUMBRE RADICULAR.
La podredumbre radicular es un hongo que, como su nombre indica, afecta a las raíces haciendo que éstas pasen de su característico color blanco a color marrón claro, que va oscureciéndose progresivamente conforme va avanzando la enfermedad.
Los síntomas es clorosis y amarilleamiento de las hojas, defoliación, marchitamiento, debilitamiento general de la planta y por último, la muerte.
Suele aparecer por exceso de riego, por un mal drenaje y por el ataque de pequeños insectos y otros organismos que dañan las raíces y provocan que éstas comiencen a pudrirse.
Tratamiento y soluciones:
Es una enfermedad bastante difícil de tratar, por ello, lo mejor que podemos hacer es prevenirla. Evitar excesos de riego, agua estancada y un mal drenaje ayudará a prevenir la aparición de este hongo.
El uso de thricodermas también ayudará a proteger a nuestras plantas de este tipo de enfermedades.
VERTICILOSIS.
La verticilosis es una enfermedad causada por los hongos Verticillium que provoca síntomas en la planta muy parecidos al del hongo Fusarium, aunque es menos común.
Al igual que en la fusariosis, el hongo obstruye el xilema de la planta, provocando que el flujo de nutrientes se bloquee y la planta no reciba alimento.
Los principales síntomas son el marchitamiento de la planta, que en ocasiones puede ser sólo parcial. Si se corta el tallo por la mitad, al igual que en la fusariosis, podremos observar el interior del tallo de color marrón rojizo.
Tratamiento y soluciones:
Una vez la planta está infectada, no se puede tratar, por lo que es indispensable la prevención. Debemos evitar plantar en la misma tierra donde ha habido una planta afectada por esta enfermedad. Utilizar tierra nueva y esterilizada y mantener siempre el lugar de cultivo limpio y desinfectado ayudará a prevenir su aparición.
ROYA.
Es un hongo bastante común que tiene un gran potencial destructivo aunque, como veremos adelante, es posible tratarlo y evitar su propagación.
Este hongo ataca principalmente las hojas y los tallos y se puede identificar por la aparición de unos pequeños bultos de color marrón, rojizo o amarillento en el envés de las hojas, mientras que en el haz aparecen manchas de color amarillento.
Las condiciones favorables para su aparición son la humedad alta y la falta de ventilación. En exterior, este tipo de hongo prolifera habitualmente durante los meses de primavera y otoño cuando las lluvias están más presentes.
Se propaga muy rápido ya que las esporas son trasportadas por el viento y esperan las condiciones adecuadas para comenzar a desarrollarse.
Tratamiento y soluciones:
Lo más habitual es que las hojas que ya han sido afectadas no puedan tratarse aunque existen diversos fungicidas sistémicos que pueden evitar la propagación del hongo.
Pueden utilizarse los tratamientos para el Oídio y Mildiu o también podemos utilizar azufre para tratar la Roya.
Si la planta está bastante afectada, lo mejor es eliminarla del cultivo para evitar que el hongo pueda afectar al resto. Obviamente, las plantas afectadas por Roya verán mermado su crecimiento y producción ya que deberán emplear fuerzas para volver a producir hojas nuevas.
Como siempre, el mejor método es la prevención y la higiene del espacio de cultivo.
ESCLEROTINIA.
La esclorotinia es un hongo que aparece en nuestras plantas en forma de micelio de color blanco con un aspecto parecido al algodón, formando posteriormente una masa dura y compacta de color oscuro conocida como esclerocio. Normalmente aparece en los tallos y se va extendiendo a las raíces. Provoca la pudrición de la zona afectada y el marchitamiento de las hojas.
Suele aparecer en ambientes con una humedad relativa elevada y temperaturas altas. Los suelos con exceso de nitrógeno también favorecen la aparición de este hongo.
Tratamiento y soluciones:
Para tratar la esclerotinia pueden utilizarse fungicidas sistémicos así como tratamientos contra el Oídio o Mildiu, sin embargo, como en todos los hongos, lo mejor es evitar su aparición.
Limpieza e higiene del lugar de cultivo, suelo con un buen drenaje, ventilación adecuada y evitar heridas que faciliten la penetración del hongo son buenas medidas de prevención.
Si alguna de nuestras plantas ha sido afectada por la esclerotinia, la mejor opción es retirarla de nuestro cultivo para evitar la propagación de esporas que puedan afectar a más ejemplares.
PYTHIUM.
Se trata de un hongo parásito que penetra en la planta a través de las raíces afectando seriamente a su sistema vascular e impidiendo que la planta reciba correctamente el alimento.
Afecta principalmente a las plantes en etapa de germinación o de plántula, fases en las que son mucho más vulnerables y en las que el ataque de este hongo provoca su muerte.
Es posible tratar a las plantas adultas afectadas por Pythium pero el ataque de este hongo perjudicará el desarrollo de la planta y por consiguiente el resultado final.
Podemos detectar el ataque de este hongo observando el comportamiento de nuestra planta. En ejemplares adultos, las hojas adquieren un aspecto débil y comienzan a amarillear y necrosar por lo que es común que podamos confundirlo con una carencia nutricional, también suelen enrollarse hacia adentro, si observamos las raíces de la planta, éstas se habrán vuelto de color marrón. Cuando afecta a plántulas y semillas en fase de germinación, este hongo causa irremediablemente la muerte de la planta y no hay tratamiento posible. En las semillas podremos detectar el ataque de este hongo ya que las semillas adquieren un aspecto blando y viscoso y no podremos hacer nada para salvarlas.
El Pythium es un hongo que prolifera en ambientes con excesiva humedad y con temperaturas de entre 20 y 30ºC.
Tratamiento y soluciones:
El mejor tratamiento que podemos utilizar para el Pythium es evitar su aparición. Para ello deberemos revisar frecuentemente las plántulas y los esquejes ya que son los más afectados. Mantener el lugar de cultivo limpio y desinfectado es clave para evitar la aparición de este hongo. Así como utilizar el sustrato, instrumentos limpios, esterilizados y agua limpia que no provenga de lugar que puedan estar infectados.
También existen algunos fungicidas en el mercado que pueden administrarse a través de pulverizaciones o del agua de riego.
ALTERNARIA.
La alternaria es un hongo bastante común que se encuentra en el ambiente y que además de afectar a las plantas, es también responsable de alergias en los humanos.
Se trata de un hongo muy presente en el ambiente, cuyas esporas son transportadas por el viento y proliferan en los restos en descomposición.
Suelen afectar en un primer momento a las hojas más viejas, en las que aparecen manchas en forma de círculo de color marrón y alrededor de la mancha la hoja adquiere un color amarillo.
A pesar de que las esporas de alternaria están presentes durante todo el año, se ven favorecidas con las humedades altas y con los cambios de temperatura, por lo que aparece más en los meses de primavera y otoño.
Tratamiento y soluciones:
Existen algunos fungicidas sistémicos que pueden ayudar a combatir la alternaria. Para ayudar a prevenirla, deberemos evitar cambios de temperatura bruscos, humedad relativa alta y mantener la zona de cultivo limpia y ventilada.
Algunos preventivos como el própoleo o la cola de caballo ayudarán a evitar la aparición de esta enfermedad.
A modo de conclusión, podríamos decir que la mejor forma de mantener nuestras plantas sanas y sacar el máximo provecho de ellas es evitar la aparición de hongos y demás enfermedades. Para ello, es importante que mantengamos nuestro espacio de cultivo siempre limpio y desinfectado y controlar el clima para intentar evitar las condiciones adecuadas de desarrollo de estos desagradables invitados.
Fuente:
geaseeds.com/